Santo Nombre de MARÍA
- Vocacion Roja y Azul - Editor
- 12 sept 2019
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Hoy 12 de Septiembre, la Familia Trinitaria Celebra la fiesta del SANTO NOMBRE DE MARÍA. Esta devoción fue propagada por San Simón de Rojas.
El nacimiento de la fiesta litúrgica del Nombre de María, en el siglo XVI, hunde sus raíces en la piedad mariana medieval y en el exaltación de los privilegios marianos, en la preocupación constante del hombre de la Edad Media por invocar y obtener la protección de María en todas las necesidades de la Vida.

¿Qué significados tiene, pues, según la etimología, ese nombre cuyo misterioso sentido solo Dios nos podría explicar?
Si, como algunos creen, deriva del idioma egipcio, sus raíces MERY o MERYT, que quiere decir MUY AMADA. Según otros, la significación sería ESTRELLA DEL MAR.
Es digno de ser notado un texto de San Bernardo de especial belleza y lirismo. Dice: “…Y el nombre de la Virgen era María. Digamos también, acerca de este nombre, que significa “estrella del mar” y se adapta a la Virgen Madre con la mayor proporción” (Hom. 2 sobre Missus est.).
Esta devoción recibe un incremento notable debido a la labor de san Bernardino de Siena (1380-1444).
El primer calendario particular que celebra esta fiesta fue el de Camaiore, el 1 de junio de 1528. Clemente VII la concedió a la Orden Franciscana en 1530 e Inocencio XII la extendió a la Iglesia universal en 1721.
San Simón de Rojas ha sido llamado “el Apóstol del Dulce Nombre de María”. Entre los siglos XVI y XVII fue su principal propagador. Comenzó a celebrar esta fiesta cuando era superior de Cuenca (1591-1594).
Fue su deseo extender esta fiesta a la Iglesia universal. Para ello se valió de su influencia en la corte de Felipe III a quien pidió que intercediera ante el santo Padre. Así mismo, solicitó del Monarca el permiso para fundar en Madrid la real Congregación del Dulce Nombre de María, proyecto que se llevó a cabo el 21 de noviembre de 1611.
San Simón de Rojas quería que bajo la protección de la Congregación se fundara siempre una obra benéfica-social.
La devoción al Nombre de María se materializó, en el caso de San Simón, en el saludo de AVE MARÍA. Eran sus primeras palabras de cada conversación, de cada saludo, de cada sermón, de sus cartas y escritos, etc.
Después de la muerte de San Simón de Rojas, la llegada de Inocencio XI al trono de San Pedro, en 1676, iba a resultar decisiva en el desarrollo de la fiesta del Nombre de María. Este Papa, Terciario Trinitario, conocía y vivía la devoción al nombre de María. Bajo su pontificado, esta fiesta se extendería a la Iglesia universal. El objetivo principal de Inocencio XI fue obtener de la Madre de Dios, parar el avance de los Turcos hacia el centro de Europa.
Debido a la protección de la Virgen María se obtuvo la liberación de Viena el 12 de septiembre de 1683. Los ejércitos cristianos iban dirigidos por el emperador Leopoldo I y
Juan III Sobieski de Polonia.
La fiesta del nombre de María sobreviviría en el Calendario general de la Iglesia (12 de spetiembre), hasta la reforma promovida por el Vaticano II. Fue suprimida por estar incluida en la fiesta de la natividad de María.
La fiesta del Nombre de María, como tal, se celebra en varias diócesis de Alemania, Austria y Suiza, y se encuentra en los calendarios propios de varias órdenes y congregaciones religiosas: Marianistas, Maristas, (Solemnidad), Escolapios (Fiesta) y Trinitarios (Memoria Obligatoria).
Fuente: "MEDITACIONES TRINITARIAS", Secretariado General Trinitario, Roma, 2003,
Artículo de Fr. Pedro Aliaga (O.SS.T.)
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